El lugar es extremadamente remoto. Una isla desierta y desierta donde los barcos a veces quedan varados. Con Sycorax a bordo, por ejemplo, que había sido perseguida por "bruja" y expulsada de Argel, y su hijo Calibán. O con Próspero, a quien su hermano Antonio derrocó y abandonó como duque de Milán, con su hija Miranda. Finalmente, el propio Antonio, que acompaña al rey de Nápoles a África a la boda de su hija y, de regreso a casa con su corte, queda atrapado en la tormenta homónima.